¿Qué hacemos con el $indicato de Pemex?
El sindicato es uno de los mayores problemas de Pemex, porque contribuye significativamente a la rigidez, ineficiencia, opacidad y corrupción de la empresa. […] El presidente Calderón tiene un plan para reducir las canonjías del sindicato, dicen los insiders. Mientras llega el momento de ponerlo en práctica, las cosas siguen como siempre. Los dirigentes sindicales fueron invitados de lujo en los festejos del 70 aniversario de Pemex y recibieron una prestación de 14 millones 745 mil 937 pesos para participar en la fiesta, como parte del contrato colectivo 2008. […] El secretario del sindicato, Carlos Romero Deschamps, se dio el gusto de alterar el protocolo para regalar a Calderón una estatuilla de vidrio de Lázaro Cárdenas y una moneda de plata. Podemos suponer que los regalos se pagaron con una parte de esos 14.7 millones. […] Duelen los 14.7 millones por lo que significan en este país. Indignan porque se complementarán con otros 26.3 millones de pesos para la celebración del 1 de Mayo. Molestan porque parecen migajas cuando se comparan con los mil 724 millones que recibió el sindicato en el affair que le costó la inhabilitación al ex director Raúl Muñoz Leos. Los mil 724 millones arden, cuando se miden frente al sobreprecio de 992 millones de dólares en la ampliación de la refinería de Cadereyta, que fue solapado por el sindicato. […] Una de las peores cosas del sindicato petrolero es que ha vuelto normales a las prácticas aberrantes. La cifra oficial relativa a los petroleros comisionados en tareas sindicales dice que son 923. Extraoficialmente se habla de 11 mil. Si esto fuera cierto significaría que nueve de cada cien trabajadores de Pemex fueron asignados a la inefable tarea de alimentar la pirámide gremial. Un lector, ingeniero petrolero de Ciudad del Carmen, me cuenta el caso de un hombre de Villahermosa que lleva 21 años comisionado al sindicato. En cinco años más se jubilará y tendrá garantizado el 100 por ciento de su sueldo. […] Definir el papel que jugará el sindicato en Pemex es tan importante como aclarar lo que pasará con el capital privado. Esta definición es un asunto de interés público y no debe hacerse en la oscuridad. La solución no es depauperar las condiciones de los trabajadores, sino poner límites. Ellos no son los dueños de Pemex.
Luis Miguel González, CAJA FUERTE, Milenio Diario, Marzo 20 / 2008
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